Somos seres humanos y, por ello, necesitamos relacionarnos con otras personas. Un terapeuta sabe que estamos diseñados para vivir en sociedad, para convivir con el resto; y una de nuestras principales formas de alcanzar la felicidad es mediante una buena relación con los amigos, familia y conocidos.
Relaciones de pareja, sociales y el matrimonio
De vez en cuando uno tiene que dedicar tiempo a revisar sus relaciones. Pese a que mucha gente piensa lo contrario, las relaciones con las personas son como las plantas: hay que regarlas, abonarlas, mimarlas, quitarles las pelusas y las telarañas; y cambiarlas de sitio y de posición cuando necesiten sol o sombra.
Por eso de vez en cuando, o bien si sucede alguna situación que te desagrade con alguna persona, amigo o familia, debes pararte a pensar sobre dicha relación y cómo mejorar, cambiar o arreglar dicha situación.
Un psicólogo te recomienda que empieces por ti
• Si algo te molesta analiza el porqué. No supongas cosas. Dedica tiempo a meditarlo y a pensarlo bien. Será una lección aprendida que podrá evitarte futuros malentendidos y disgustos, pero sin recrearse en ello: buscamos soluciones, no pasarlo mal.
• Si alguien “no te aporta nada”, piensa en las razones: ¿ya no tenéis feeling? ¿Habéis tenido varios roces? ¿Ya no compartís cosas en común? ¿Quizá la dejadez y la falta de tiempo han acabado con vuestra relación?
• Aún así, si en general estás desganado y desmotivado, piensa que quizás debes trabajar tu felicidad y tu yo interior antes de poder relacionarte de una manera natural con el resto. Muchas veces es lo primero que deberíamos hacer. Come sano y equilibrado, sigue una rutina, duerme tus horas, haz algo de ejercicio, intenta tener unos buenos hábitos; y, sobre todo, adopta una actitud positiva. Una vez que estas cosas estén bien podrás tener relaciones fructíferas y satisfactorias con tu entorno.
Ahora es el turno de tus relaciones personales
1. Primero debes saber diferenciar entre familia, amigos y conocidos; y a poder ser, en este mismo orden.
2. Tienes que entender que hay gente indispensable y gente que no lo es.
3. Sé consciente de que a lo largo de tu vida conocerás mucha gente y no todos pertenecerán a tu entorno.
4. Debes saber que la vida está compuesta de ciclos, etapas y épocas y que estos son los que la hacen más interesante.
5. Aprende a identificar cuando algo o alguien es bueno para ti o no; y si no te sirve, desecharlo (aunque sea difícil hacerlo).
6. Busca tu propio bien, sin ser egoísta. Recuerda que las relaciones son necesarias para vivir y te aportarán la felicidad.