Cualquier empresa tiene por objetivo mejorar sus resultados globales y para ello es necesario conocer muy bien los puntos fuertes y débiles así como las destrezas individuales de cada uno de sus directivos, mandos intermedios y en general, las de los equipos que conforman una empresa.

 

Para poder llevar a cabo un cambio en una empresa y que se comiencen a ver mejoras en los resultados a corto, medio y largo plazo, a veces es necesaria la ayuda de alguien externo, un Coach que sea capaz de descubrir todo el potencial que tiene una empresa – y sus integrantes- y desarrollarlo.

 

El Coaching para ejecutivos se enfoca en los trabajadores, en que éstos sean conscientes de sus competencias y debilidades, sus necesidades y sus valores para poder determinar, en base a esto, qué metas puede cumplir un trabajador individualmente y en grupo, tratando siempre de recordar que es fundamental tener presente la auto superación.

 

Cualquier directivo ha de ser honesto consigo mismo, ha de reconocer y aceptar quién es, qué quiere y hacia dónde va en su vida para poder entender y dar respuesta a preguntas como: ¿Con qué fin me estoy marcando esta meta? Si me comprometo con esta meta, ¿a qué estoy dispuesto a renunciar? Con qué fuerzas sacaré la energía necesaria para conseguir lograrla? ¿Estoy seguro de querer que un resultado dependa de mi competencia así como las posibles consecuencias derivadas de dicha decisión?

 

El coaching para directivos permite que los trabajadores desarrollen su autoconocimiento y consigan ser conscientes de que las decisiones que tomen, las metas que establezcan y los objetivos que cumplan, pueden ayudarles a sentirse satisfechos en su vida profesional y a superarse a sí mismos en el día a día.

 

Todo trabajador quiere aprovechar su potencial y superar los retos que se plantee para cumplir sus expectativas y como no, las de la empresa.

 

En la actualidad, muchas empresas sufren altos niveles de absentismo, rotación de trabajadores no deseada y ven cómo el trabajo en equipo es insuficiente y poco efectivo, algo que puede estar generado por el bajo nivel de satisfacción de los empledos en el trabajo, bajos niveles de motivación o incluso diferencias culturales.

El coaching profesional ayuda a las empresas a que sus empleados se autoconozcan, sean conscientes de su fortalezas y debilidades y finalmente ayudan a redefinir la estrategia que ayudará a que sus equipos funcionen con rendimientos excelentes.